Cuando decidí renovar mi habitación, tenía una idea clara en mente: quería demostrar que los papeles de colgadura oscuros no achican los espacios, sino que, bien utilizados, pueden hacerlos más acogedores y elegantes.
Mi elección fue un papel con fondo azul oscuro y un diseño de hojas en silueta que parecía moverse con el viento. Al combinarlo con mi cama, también en tonos azules, creé un ambiente uniforme y armonioso. Desde el momento en que se instaló el papel en una de las paredes principales, la percepción del cuarto cambió drásticamente. La habitación no solo se sintió más acogedora, sino que también ganó un aire de sofisticación.
A lo largo de mi experiencia con clientes, he notado que muchas personas temen utilizar colores oscuros en sus espacios. Piensan que reducirán la sensación de amplitud o harán que el ambiente se vea más pesado. Sin embargo, este proyecto personal me permitió comprobar que, al elegir el diseño adecuado y combinarlo inteligentemente con el mobiliario y la iluminación, un papel de colgadura oscuro puede transformar cualquier espacio en un refugio cálido y elegante.
Aquí te comparto algunas fotos del antes y después, donde se puede apreciar cómo la elección del papel de colgadura transformó por completo el ambiente. La diferencia es notable: el espacio pasó de ser un cuarto convencional a un entorno sofisticado y acogedor, con una sensación de profundidad que antes no existía. Espero que esta experiencia inspire a más personas a atreverse con diseños que, aunque pueden parecer arriesgados a primera vista, tienen el poder de redefinir completamente un ambiente.